
No te pago para pensar: te pago para trabajar
No te pago para pensar: te pago para trabajar. Cuántas veces habrás escuchado esta frase, ya sea dirigida a ti o en alguna conversación cruzada. Es, tristemente, propia del paradigma de un mal gestor de empresa. ¿No crees que las personas deberían tener más protagonismo en las organizaciones? Esta frase, que un día salió en una conversación tomando una hamburguesa con mi amigo Floren, fue el germen de un libro que acabamos de terminar. Pronto nos dimos cuenta de que